1) Capta la atención del público:

a) Cuerpo y Voz: Entona y habla de forma clara, con voz alta y lentamente (no dejes que se “atropellen” las ideas); cuida la postura (por ejemplo: no pongas las manos en los bolsillos); maneja correctamente los gestos (sencillos y naturales); utiliza un vocabulario correcto y mira al público.

b) Tema: Sé original y comienza con algo llamativo entorno al tema elegido para captar al público (imagen, anécdota, curiosidad,…).

2) Estructura el texto:

Es muy importante que ORDENES bien las ideas que vas a exponer. Para ello puedes elaborar un GUIÓN que siga un orden lógico, por ejemplo: Introduce del tema, desarrolla las ideas y concluye con una reflexión, aprendizaje, idea clara, opinión… que llame la atención.

(Ajusta lo que quieres decir con el tiempo que tienes para ello.)

3) Exprésate correctamente:

Utiliza un registro formal.

Evita las muletillas.

Cohesiona bien el discurso: utiliza conectores, no dejes oraciones a mitad, mantén la correlación verbal y concordancia entre palabras,…

4) Apóyate con una diapositiva:

Prepara una diapositiva sencilla que sirva de apoyo a tu exposición y que sintetice el tema del que vas a hablar.

No escribas mucho texto. Puedes hacer un esquema de tus ideas y/o poner imágenes que ayuden a entender tu exposición.

La diapositiva debe ser vistosa y atractiva, pero no la cargues de información.